El placer que provoca la belleza física en la psique del ser humano ha ido más allá de las condicionantes reproductoras. Con el transcurrir del tiempo y el avance de la sociedad, esta ha llegado a ser sumamente apreciada en diversos ámbitos.
En la actualidad los medios publicitarios nos muestran un ideal determinado por la perfección física, el uso de modelos visualmente atractivos como estrategia de venta les ha conferido múltiples beneficios reflejados en su economía.
La utopía creada con propósitos financieros ha influido en la sociedad introduciendo la creencia de que ser hermoso es forzoso para ser feliz, por tal motivo es indispensable echar mano de cremas, maquillajes, dietas, ropa y cirugías que realcen la belleza y/o eliminen cualquier indicio de fealdad ya sea genética o como resultado del paso del tiempo.
El mensaje implicito de esta premisa falsa que ha creado severos estragos en la percepción del inconciente colectivo es que si eres bello tu vida está resuelta pero si no te encuentras dentro de este pequeño porcentaje que cumple con los estándares áureos y proporcionales, entonces lo que te espera es una tragedia.
Es ineludible desmitificar este paradigma ilusorio y dañino determinando desde una perspectiva objetiva el grado de influencia que tiene la belleza para abrir las puertas hacia el bienestar interior.
En primera instancia definiremos que mitos atañen la belleza que hacen pensar que esta por si sola le concierne al poseedor de tal cualidad, propiedades "sobre naturales y cuasi mágicas" para ser feliz.
MITO 1: SER BELLO ES SINÓNIMO DE SER FELIZ
Observa las siguientes fotografías publicitarias:
Si te percatas, todos los personajes comparten algo más que belleza física, en las imágenes los modelos se encuentran sonriendo, empero ¿es su sonrisa auténtica?
Paul Ekman el aclamado autor del libro Como detectar mentiras determinó que existen 18 tipos de sonrisas que expresan diversas emociones que van desde el desdén hasta el temor, las cuales pueden identificarse según el movimiento de la musculatura facial.
De estas gesticulaciones establece que solo una es el reflejo de la emoción de felicidad auténtica, se puede saber porque la mueca realizada por la boca viene acompañada por la contracción de los músculos alrededor de los ojos, para ser más específicos son las arrugas conocidas como patas de gallo.
Si la ilación de belleza = felicidad fuera cierta, entonces toda la gente con cualidades corporales estéticas estaría feliz todo el tiempo y su sonrisa sería franca hasta en las fotografías.
MITO 2: LOS BELLOS SON SIEMPRE MEJOR TRATADOS POR LA SOCIEDAD
La gente bonita es bien aceptada en ciertos sectores (en el de la moda por ejemplo), sin embargo en los lugares donde lo que se valora es el intelecto, la belleza a veces resulta contraproducente debido a los clichés que asocian esta a la falta de capacidad cognitiva.
También experimentan otro tipo de rechazos provocados por la envidia, en algunas ocasiones son víctimas de bullying e incluso llegan a ser boicoteados por seres poco conscientes y con baja autoestima.
La cosificación de hombres y mujeres atractivos con fines mercadotécnicos ha llegado a tal punto que en ciertos núcleos, el acoso sexual es "válido" debido a que la percepción de los modelos ya olvidó tomar en cuenta también su humanidad, convirtiéndolos en simples objetos de posesión con fecha de caducidad.
MITO 3: LOS BELLOS NO SIENTEN
Las personas agraciadas no están exentas de las emociones inherentes a nuestra especie, lloran, ríen, se duelen, entristecen, aman, etc. Son seres sensibles con capacidades afectivas, llenos de virtudes y defectos que son determinados por su estado interior, no por el estuche en el que se encuentran. No siempre tienen ganas de sonreir y no siempre les va bien, porque también son proclives a la inestabilidad inherente a la vida.
De lo anterior y en este sentido, se puede deducir que la búsqueda incansable de la sociedad por alcanzar y perpetuar la belleza para así consolidar la felicidad, se sustenta frecuentemente en deducciones falsas.
Hoy quiza sea tiempo de reconceptuar y definir un nuevo rumbo en la búsqueda de la felicidad que vaya más allá de la percepción y autopercepción focalizada en el exterior orientando su exploración al interior, porque tal vez sea cierta la leyenda urbana que es en la mente y en el corazón donde esta realmente se aloja.
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Nuño (jueves, 30 mayo 2013 10:51)
Creo que ser guapo es un punto en la sociedad, igual que ser rico, inteligente, vestir bien, ser educado... quizás no sea la mas importante de todas las cualidades para ser reconocido, pero influye y esta demostrado que entre personas del mismo sexo se tiende a tratar mejor a las personas atractivas.